El reto de ser adolescente


Durante esta cuarentena han llegado a mi preguntas que no sabía que existían antes, que no habían salido a la luz por la vida apresurada que en ocasiones los seres humanos llevamos o por el poco tiempo que le dedicamos a escuchar nuestros pensamientos o emociones. Por esa razón se que ser adolescente en una etapa así puede llegar a ser realmente complicado, porque antes habían clases, personas, lugares que te hacían olvidarte de esos problemas o conversaciones tan importantes contigo mismo, aunque por suerte estos incentivos están regresando poco a poco a nuestras vidas, pero si regresamos a la vida tan acelerada de antes...¿Cuándo existirá ese tiempo para recordarte lo valioso que eres o resolver todas esas preguntas que abundan en nuestro ser? o incluso ¿Cuándo tomarás el momento de cerrar esas cicatrices que no te dejan avanzar hacia el mañana?

Sin duda ser adolescentes o adultos jóvenes en un tiempo tan difícil ha sido un gran reto que muchos tuvieron que pasar y no solo por el simple hecho de sentirse aislados del mundo que los rodeaba o de la vida que deseaban vivir al estar en una nueva etapa de sus vidas, porque también hubo muchos que se perdieron de momentos tan importantes en su vida como es su última graduación y compartir esos últimos momentos con esas personas tan especiales que llegaron a su vida en un parpadeo de ojos.

Definitivamente en estos últimos años hemos tenido que enfrentar momentos tan complicados, desde una perdida familiar hasta una pelea con nosotros mismos que no sabíamos que existía en nuestro interior, el hecho de pelear con un trauma pasado para sanarnos o conocernos más se ha convertido en algo difícil si no tienes alguien con quién hablar sobre eso o que te escuche para que te de una pequeña opinión o consejo que salve tu existencia. Aunque lo más probable es que entre todas esas dudas que nos quedan en el interior las más importantes sean…¿quién soy en realidad? ¿qué me gusta o qué no me gusta? ¿cuál es el motivo de vivir?

Lo cierto es que vivir se vuelve algo más complicado cuando estas encerrado y privado de ver a esas personas que quieres y que te entienden, pero también se ha vuelto difícil porque tenemos que aprender vivir de una manera completamente diferente y eso también significa ver el mundo desde un punto diferente. Es cierto que el miedo puede reinar en nuestros pensamientos, pero las ganas y ansias de ir a descubrir el mundo serán aun más fuertes porque el ser humano es un ser meramente curioso y con hambre de comer al mundo hasta sus más mínimos rincones.

Aunque a la vez ser joven no solo significa explorar o salir de fiestas todos los días, también es un proceso al que no siempre estamos preparado para afrontar solos, en ocasiones se vuelve más fácil si te encuentras cerca de alguien que te puede entender o hasta incluso orientar cuando lo necesitas, pero lo cierto es que cuando no hay nadie que te guíe u oriente, tú tendrás que ser tu mejor maestro para este camino que llamamos vida. Es verdad de que llegamos al mundo solos y probablemente nos iremos así, pero solo nosotros podremos ser nuestros mejores maestros y nuestro mejor apoyo cuando más lo necesitemos, aunque si somos nuestro apoyo...entonces ¿por qué tratamos de ponernos el pie para no avanzar a un mejor camino?

Hay veces en que lo hacemos sin pensarlo, simplemente lo hacemos como si fuese algo normal o natural cuando en realidad no debería de ser así y menos hacerlo a nosotros mismos, pero la forma en que lo hacemos es por el miedo. Ese sentimiento en ocasiones puede ser realmente dominante si no sabemos como controlarlo de forma adecuada . Una ocasión vi que solo el 91% de nuestros miedos no se vuelven realidad, mientras que solo un 9% de ellos si se vuelven, es curioso que en esta cifra nos domine más el miedo que la realidad. Por lo tanto, eso significa que podemos dejar de ser nuestros propios saboteadores por el miedo al fracaso o al cambio, aunque a veces hacer cambios nos puede ayudar demasiado y podemos sacar a flote nuestra mejor versión de nosotros que no sabíamos que existía o incluso nos puede llevar a cumplir esos sueños que tanto anhelamos desde el corazón. 

Otro reto importante de ser adolescente es aprender a amar, a ver la vida de una mejor manera y no solo solitaria o triste, si no llena de colores, de colores tristes, felices, de colores que tienen enojos o simples lagrimas. En ocasiones estamos acostumbrados a ver la tristeza como una debilidad, como algo malo o como algo prohibido cuando en realidad no es así, de hecho esta bien hacerlo porque las lagrimas pueden ser el mejor remedio para aquello que no podemos explicar tan fácil. Hace poco en un libro llamado "Lo bueno de tener un mal día", escrito por Anabel Gonzalez, pude entender que sentirse triste, enojado o frustrado esta bien, no tiene nada de malo expresar esas emociones y menos cuando algo te lastima, enoja o hace que tengas un mal día, pero es importante saber como mostrar esas emociones porque si te enojas y lo expresas al momento con una gran rabia puede desatarse graves consecuencias, en cambio cuando lo haces de una mejor manera sin lastimar a nadie por medio de un deshago las cosas pueden mejorar y la situación también. 

Otra cosa muy importante que menciona en su libro es que una emoción que hemos guardado por tantos años, pueden volver a salir, claro que sera algo difícil por el ardo trabajo que le hemos empeñado a guárdalas, pero así como aprendimos a hacerlo también podemos volver a aprender para mostrarlas y esto es un largo camino que solo cada uno de nosotros aprenderá a como descifrar de manera adecuada, aunque si estamos rodeados de las personas adecuadas esto puede volverse más fácil o sencillo.

Ser adolescente es una hermosa etapa de la vida, se pueden descubrir cosas nuevas, reencontrarnos, aprender de nuestros gustos, encontrar una nueva forma de amarnos, de creer en nosotros pese a las adversidades, de amar a la vida y verla con colores muy brillantes, podemos llegar a sufrir por traumas o problemas del pasado, pero podemos encontrar la solución al mejor camino, hacia un mejor mañana lleno de posibilidades y hacia una mejor versión de nosotros y definitivamente esta bien sentir, llorar, reír y enojarse, siempre y cuando lo sepamos hacer de una forma sana y sin lastimar a nadie, ese el hermoso e increíble reto de ser adolescente.


-JesEn

Comentarios

Entradas más populares de este blog

“Un nuevo rayo de esperanza”

Cap 4. Luna